Brote de sarampión: lo que necesitas saber
THE NEW YORK TIMES
En Estados Unidos se declaró la eliminación del sarampión en 2000, pero han ocurrido brotes esporádicos en los últimos años. Se han registrado 314 casos individuales confirmados en quince estados en 2019, de acuerdo con el gobierno federal. A continuación, lo que necesitas saber sobre la enfermedad y el riesgo de contagio.
¿Qué es el sarampión?
El sarampión es un virus extremadamente contagioso. Puede causar síntomas respiratorios graves, fiebre y sarpullido. En algunos casos, especialmente en bebés y niños pequeños, las consecuencias pueden ser graves. El sarampión causó la muerte de 110.000 personas en todo el mundo en 2017, la mayoría de ellas eran niños menores de 5 años.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, uno de cada diez niños con sarampión sufre una infección de oídos, la cual puede causar sordera permanente. Uno de cada veinte niños con sarampióndesarrolla neumonía y uno de cada mil desarrolla encefalitis, una inflamación del cerebro que puede generar daño cerebral. Las mujeres embarazadas con sarampión corren mayor riesgo de dar a luz bebés prematuros o con bajo peso al nacer.
Uno o dos de cada mil niños que se contagie del virus morirá. En países donde la vacunación contra el sarampión no es rutinaria, el sarampión es una causa significativa de muerte, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.
¿Cómo se contagia el sarampión?
El sarampión se contagia por pequeñas gotas provenientes de la nariz o boca de una persona infectada. Si estás en una habitación con alguien infectado de sarampión, puedes inhalar su virus cuando esa persona tosa, estornude o incluso cuando hable. Las personas infectadas pueden transmitir el virus del sarampión desde cuatro días antes de desarrollar sarpullido, así que pueden ser contagiosos antes de que se den cuenta de que tienen la enfermedad. Son capaces de contagiar el virus durante alrededor de cuatro días después de que el sarpullido aparece.
El virus también puede subsistir en superficies durante varias horas, y es tan contagioso que, de acuerdo con los CDC, "puedes infectarte de sarampión tan solo con estar en una habitación donde una persona con sarampión ha estado, hasta dos horas después de que esa persona se haya retirado".
¿Cuáles son los síntomas del sarampión?
De acuerdo con la Clínica Mayo, las personas no muestran síntomas hasta dos semanas después de haber sido infectadas. Entonces, desarrollan síntomas típicos de un resfriado o un virus: fiebre moderada, tos, dolor de garganta, escurrimiento nasal, así como ojos rojos e inflamados.
No obstante, después de dos o tres días de eso, la fiebre se eleva a 40 o 41 grados Celsius y aparecen las reveladoras manchas rojas en la piel, primero en el rostro, después se extienden por el cuerpo.
¿Existe una cura para el sarampión?
No. La vasta mayoría de las personas que se contagian de sarampión no han sido vacunadas, y darles la vacuna del sarampión dentro de las 72 horas posteriores a la exposición al virus puede ayudar —por lo menos a reducir la gravedad y la duración de los síntomas—. La Clínica Mayo dice que las mujeres embarazadas, los bebés y las personas con un sistema inmunitario débil pueden recibir una inyección de anticuerpos llamada inmunoglobulina sérica dentro de los primeros seis días después de ser expuestos al sarampión, lo que puede prevenir o aminorar los síntomas.
¿Qué tan segura y efectiva es la vacuna contra el sarampión?
Extremadamente segura y efectiva. La vacuna sarampión-paperas-rubéola (conocida como MMR o triple viral) no causa efectos secundarios en la mayoría de los niños. Pocas personas pueden experimentar una fiebre moderada, sarpullido, dolor o hinchazón, afirma personal de los CDC. Los adultos o los adolescentes pueden sentir dolor temporal o rigidez en el lugar de la inyección. En raras ocasiones, la vacuna puede causar una fiebre alta que puede generar un ataque convulsivo, de acuerdo con los CDC. Contrario a los rumores que algunos activistas antivacunas siguen repitiendo, la vacuna no causa autismo.
Los niños deben recibir dos dosis de la vacuna: la primera cuando tienen entre 12 y 15 meses; la segunda cuando tienen entre 4 y 6 años. Si los bebés que tienen entre 6 y 11 meses de edad van a viajar de Estados Unidos a otro país, los CDC recomiendan que reciban de antemano una dosis de la vacuna.
Una dosis de la vacuna es alrededor del 93 por ciento efectiva; dos dosis aumentan esa cifra al 97 por ciento, dicen los CDC.
Las personas que no se vacunen corren un muy alto riesgo de contagiar sarampión. "Casi todas las personas que no han recibido la inyección MMR se contagiarán de sarampión si se exponen al virus", dijeron representantes de los CDC.
Si no estoy vacunado, ¿es demasiado tarde para recibir la vacuna?
No es demasiado tarde. De hecho, si hay casos de sarampión en tu comunidad, es una buena idea vacunarte a menos de que estés seguro de haber recibido previamente ambas dosis de la vacuna MMR; o has padecido las tres enfermedades contra las que te protege la vacuna (lo cual te da inmunidad vitalicia); o si naciste antes de 1957 en Estados Unidos. (La vacuna estuvo disponible a partir de 1963 y en la década previa, virtualmente cada niño padeció sarampión antes de cumplir 15 años, así que los CDC consideran que las personas nacidas antes de 1957 probablemente tuvieron sarampión cuando eran niños).
Si la mayoría de la gente se vacuna, ¿por qué importa si yo no vacuno a mi hijo?
Probablemente estás pensando en el concepto de inmunidad de grupo (o de rebaño), que significa que si un número grande de personas están protegidas de una enfermedad por una vacuna, la enfermedad tiene menos probabilidades de circular, lo que disminuye el riesgo para las personas que no están vacunadas. El umbral para inmunidad de rebaño varía de acuerdo a la enfermedad: para una enfermedad altamente contagiosa, se necesita un muy alto porcentaje de personas vacunadas para llegar a ese umbral.
Debido a que el sarampión es tan contagioso, entre el 93 y el 95 por ciento de las personas en una comunidad necesitan estar vacunadas para lograr la inmunidad de rebaño. Recuerda, algunas personas no pueden ser vacunadas por razones médicas: infantes, mujeres embarazadas y personas inmunocomprometidas.
Durante el brote de Disneylandia en 2015, un bebé de 9 meses cuyos padres planeaban inmunizarlo contrajo sarampión de un niño de mayor edad que no había sido vacunado, dijo Annabelle De St. Maurice, una experta en enfermedades infecciosas en la Universidad de California en Los Ángeles. Así que vacunar a tu hijo no solo lo protege, también ayuda a proteger a otros en tu comunidad.
Un momento… ¿no habíamos eliminado el sarampión?
En el año 2000, el sarampión fue declarado eliminado de Estados Unidos porque el país había superado más de doce meses sin ninguna "transmisión continua de la enfermedad" dentro de sus fronteras. "Eliminada" no significa que la enfermedad fue completamente erradicada, significa que Estados Unidos ya no tiene lugares donde la enfermedad sea endémica o se genere.
Ha habido un número pequeño de casos de sarampión en Estados Unidos desde ese entonces: desde 37 en 2004 hasta 667 en 2014, en gran medida entre personas que no están vacunadas. Hasta el momento durante este año, ha habido cinco brotes (definidos como tres o más casos) en Nueva York, Texas y el estado de Washington, que dan un total de más de 120 casos.
La mayoría de los casos en Nueva York afectaron a comunidades judías ortodoxas en Brooklyn y el condado Rockland. Un niño sin vacunar se contagió de sarampión en Israel, y contagió a los niños sin vacunar. El Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York recomienda una vacuna MMR para cualquier persona que viaje a Israel, donde hay una ola de casos.
La mayoría de los casos en Estados Unidos desde 2000 han sido resultado de las personas que viajan desde o hacia países donde el sarampión es endémico porque hay poca vacunación.
¿Cuántas personas han sido vacunadas?
Un número pequeño en áreas dispersas. La inmunización de sarampión en Estados Unidos es estable y alta —más del 90 por ciento— de acuerdo con el rastreo de los CDC.
¿Quiénes son las personas que no se están vacunando?
Una manera de medir es observar la evaluación anual de vacunaciones de jardines de niños. Esta muestra que Colorado, el Distrito de Columbia, Idaho y Kansas están por debajo del promedio nacional de vacunación del 90 por ciento, aunque en ciertas comunidades el promedio puede ser menor.
Generalmente, aquellos que no inmunizan a sus hijos, en términos demográficos, son más blancos y cuentan con mayor educación, dijo De St. Maurice. "En parte debido al éxito de las vacunas, las personas no están tan familiarizadas con estas enfermedades, así que cuestionan su efectividad", dijo. A la inversa, cuando la enfermedad reaparece, como lo hizo en Washington, la demanda por vacunas aumenta.
¿Los estados de Estados Unidos no tienen leyes que requieran que los padres vacunen a sus hijos?
Cada estado tiene sus leyes. Tres estados permiten solo excepciones por razones médicas: Misisipi, Virginia Occidental y, más recientemente, California, después del brote de Disneylandia. El resto también concede excepciones por creencias personales, filosóficas o religiosas.
¿Los estados con las leyes más permisivas son los que tienen la mayor cantidad de casos?
No ha habido suficientes casos para requerir una gran encuesta, pero Saad Omer del Centro de Vacunación Emory en Atlanta advirtió que con un número de casos al alza, eso podría cambiar.
Omer, quien estudia la cobertura de la inmunización y la incidencia de las enfermedades, dijo que la investigación ha mostrado que en los estados que permiten más excepciones se han incrementado los brotes de pertussis (o tosferina).
Los estudios también han demostrado que las personas que rechazan las vacunas están representadas de manera desproporcionada en las primeras etapas de los brotes. "Están aportando la madera que puede iniciar los fuegos de las epidemias", dijo Omer.
¿Cómo se compara la situación de Estados Unidos con la de otros países?
Los casos de sarampión también se han incrementado en todo el mundo. En el ámbito mundial, hubo un descenso del 80 por ciento en las muertes por sarampión entre 2000 y 2017. Sin embargo, los casos de sarampión reportados han incrementado un 30 por ciento desde 2016, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.
El 94 por ciento de los niños en Estados Unidos reciben las dos dosis recomendadas de la vacuna. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, más de una decena de países llegaron a la marca del 99 por ciento, incluidos Cuba, China, Marruecos y Uzbekistán. Canadá, el Reino Unido y Suiza son algunos de los países occidentales que se ubican por debajo del 90 por ciento.
En Europa, solo alrededor del 90 por ciento de los niños reciben las dos dosis recomendadas de la vacuna. En el ámbito mundial, alrededor del 85 por ciento de los niños reciben la primera dosis, pero la cifra desciende al 67 por ciento para la segunda dosis, según muestran los datos.
¿Esto significa que las paperas y la rubéola también están resurgiendo?
La vacuna MMR también ha reducido en gran medida la amenaza de paperas y rubéola en Estados Unidos. No es tan efectiva contra las paperas, con el 88 por ciento de efectividad, de acuerdo con los CDC, y los casos se han incrementado en los últimos años, de 229 en 2012 a 6366 en 2016.
La rubéola solía causar millones de contagios en Estados Unidos. De acuerdo con los CDC, 12,5 millones de personas tuvieron rubéola en una epidemia entre 1964 y 1965, y la enfermedad causó que 11.000 mujeres perdieran a sus hijos durante el embarazo, que murieran 2100 recién nacidos y que 20.000 bebés nacieran con el síndrome congénito de la rubéola, el cual puede causar daño cerebral y otros problemas graves.
La rubéola fue declarada eliminada en Estados Unidos en 2004, y los CDC dicen que menos de diez casos se reportan cada año. Sin embargo, como con el sarampión y las paperas, todavía existen muchos países donde persiste la rubéola debido a la falta de vacunación, y cada caso desde 2012 ha sido rastreado hasta personas que se infectaron cuando viajaban o vivían en otro país.