El enoturismo sigue sumando atractivos en Neuquén
Viñas Constanza, una bodega familiar en Centenario, se perfila como un atractivo emergente para el enoturismo en Neuquén, ofreciendo una experiencia única con sus vinos y productos artesanales en un entorno ideal para los amantes del buen vino.
Con una producción que incluye varietales como Refosco, Malbec y Chardonnay, la bodega Viñas Constanza se ha ganado un lugar destacado en el circuito vitivinícola regional. Además, este año lanzó un innovador Vermouth y una línea de vinagres de vino, ampliando su oferta para atraer tanto a turistas como a aficionados al vino.
Fabián, su propietario, destacó durante una reciente visita de la subsecretaria de Turismo, Silvana Cerda, el compromiso de la bodega con la calidad y la experiencia del visitante. Viñas Constanza se caracteriza por ser un emprendimiento familiar que refleja el esfuerzo de cada integrante para ofrecer una atención personalizada y la dedicación puesta en cada botella.
Las visitas están orientadas a ofrecer una experiencia completa, desde el recorrido por la bodega hasta las degustaciones, en un ambiente cálido y acogedor.
Ubicada en Centenario, a pocos kilómetros de la ciudad de Neuquén, Viñas Constanza comenzará con el proceso de habilitación, ya que ofrece la posibilidad de ser visitada tanto de manera individual como a través de programas organizados por agencias de la región.
Este atractivo emergente tiene un gran potencial para integrarse al circuito enoturístico de la provincia, consolidándose como un destino clave para los turistas que buscan disfrutar de la esencia del vino en un entorno natural único.